Frente a la situación de desinformación generada por algunos sectores sobre la implementación del Currículo Nacional 2017, representantes del Consejo Nacional de Educación (CNE) aseguraron que dicho documento no interfiere con el derecho de las familias para educar a sus hijos, y sostuvo que el sistema educativo promoverá en las escuelas un clima de valoración para el estudiante, de tolerancia a las diferencias, y que combata situaciones indeseables como el acoso, la discriminación y la violencia.

Hugo Díaz, presidente del CNE, recordó que en los dos últimos currículos nacionales se ha recogido como enfoque transversal a la igualdad de género, reconociendo así que las personas, más allá de sus diferencias biológicas, tienen el mismo valor y deben tener oportunidades de desarrollar capacidades para ejercer los mismos derechos fundamentales.

Asimismo, el funcionario indicó que debido a la preocupación y oposición manifestada por algunos grupos de ciudadanos, ante la próxima implementación de un nuevo currículo nacional que incluye entre sus enfoques transversales uno de igualdad de género, el CNE consideró salir al frente para dar a conocer sus conclusiones sobre el tema en mención.

“Está en juego el derecho de las niñas y los niños a disfrutar de una educación sin ningún tipo de discriminación. Todos los niños y adolescentes tienen el derecho a ser acogidos, queridos, respetados y protegidos por sus familias y en sus escuelas”, comentó el presidente del CNE, tras hacer un llamado a todos los actores que intervienen en el debate para que este se desarrolle con seriedad y de forma alturada.

Finalmente, consideró que no se podrá lograr una sociedad democrática, solidaria y justa si desde el sistema educativo no se contribuye a derribar las barreras y a valorar la diversidad. “Por tratarse de derechos, es un tema público que necesita ser abordado por las políticas educativas”, señaló.