Al recalcar la importancia de continuar con la reforma educativa impulsada por el actual gobierno, el titular del sector Jaime Saavedra Chanduví insistió en que el Perú debe mantener la obsesión por mejorar la educación y en especial la pública, para lo cual será necesario de una mayor inversión y del compromiso de toda la comunidad educativa.

Sostuvo que para hacerlo posible se requiere que los futuros gobiernos asuman el compromiso político de seguir invirtiendo en fortalecer la calidad educativa sobre la base de la revalorización docente, una gestión moderna del sector, mejor infraestructura y programas pedagógicos innovadores para reforzar los aprendizajes.

Puntualizó además que para avanzar con la reforma se requieren recursos económicos y así recordó que el Estado peruano asumió el compromiso internacional ante el Foro Mundial de Educación de invertir 6% de su producto bruto interno (PBI) en mejorar la calidad educativa al 2021.

“Es correcto trazarse la ruta del 6%, pero es muy difícil para un país como Perú pasar inmediatamente del 4% al 6% porque implicaría un incremento de miles de millones de soles, que en un año puede ser difícil de gestionar, pues una cosa es tener recursos y otra gastarlos adecuadamente” sentenció.

En ese contexto, comentó que se están adoptando medidas diversas para mejorar la calidad del gasto al tiempo de acelerar los procesos de inversión, como ocurre en el caso de la ejecución de obras de rehabilitación de colegios públicos.

Para ello, se siguen promoviendo inversiones a través de los mecanismos de Obras por Impuestos (OxI) y Alianzas Público Privadas (APP) que permiten agilizar las inversiones. De igual modo, se impulsan licitaciones por paquete de modo que resulten más atractivas para las empresas constructoras que participan en las convocatorias públicas que involucran la ejecución de obras en zonas remotas de la selva, por ejemplo.

“Ya estamos más allá del punto de inflexión, sabemos que el cambio puede darse y que la excelencia en la educación puede lograrse”, aseguró el Ministro agregando que se han logrado avances importantes como la inversión anual por estudiante que pasó de 650 a mil dólares. Sin embargó, anotó que hay mucho por trabajar para llegar a los US$ 7 mil de inversión en países desarrollados.

El pilar fundamental de esta reforma es la comunidad educativa y dentro de ella los directores de cada colegio público y privado que deben reunir las capacidades de gestión necesarias.

En otro momento, se refirió a la Reforma Universitaria como esencial y vital para mejorar la calidad del servicio que se brinda a los estudiantes. Pidió al Congreso aprobar la Ley de Instituciones, por ser la única que falta para completar el marco legal de la modernización de la educación superior que está en marcha.

“Toda reforma tiene ganadores y perdedores. Los ganadores son los estudiantes y los perdedores —en el caso de las universidades privadas— son los promotores de las instituciones de mala calidad a los que ahora se les exige muchísimo más; y por otro lado, los grupos de poder enquistados en las universidades públicas cuya gestión no ha estado centrada en la calidad de la formación de los jóvenes ciudadanos” sentenció.